Su realización fue muy entretenida y, por sobre todo, productiva. Si bien suelo tomar fotos con bastante frecuencia, la idea de realizar un trabajo más específico (como lo es retratar un lugar que me represente) me motivó mucho. El primer acercamiento, junto con las correcciones, me hizo notar la inexperiencia de mi mirada con respecto a varios puntos. Uno de ellos es la no-postura: es decir, la falta de posicionamiento mediante un punto de vista claro y auténtico. Esto se refleja notablemente en la primera parte del trabajo, donde en mis primeras tomas lo que se expone está mucho más cerca de una "belleza formal", que de una opinión.
Después de haber notado esto, gracias a las correciones y críticas, mi postura fue variando.
Realmente el proceso, el "día a día", me fue muy útil. Conectarme más con el lugar, concurrirlo en diferentes horarios y días y tratar con la gente que allí trabaja fue lo que me llevó a encontrar mi punto de vista sobre él.
Confieso que hacia el final se me volvió un tanto pesado, ya que me la pasaba sacando y viendo fotos sobre lo mismo. Por suerte ya terminó, y estoy conforme con lo realizado, aunque sin dudas hay muchísimo para mejorar.-
